Desde el comienzo de la pandemia de COVID-19, las personas de todo el mundo han priorizado su salud y bienestar más que nunca. Una gran parte de esto implica obtener una mayor conciencia sobre los beneficios del sueño para la salud.

El sueño es un reinicio para la mente y el cuerpo, es lo que fortalece la salud tanto física como cognitiva, y ayuda a las personas a realizar mejor las tareas que requieren largos períodos de concentración. Descansar bien puede, por ejemplo, ayudar a las personas a trabajar de manera más productiva y pensar con mayor claridad.

Debido al impacto que tuvo la pandemia en nuestros hábitos diarios, vale la pena explorar cómo nuestro sueño puede haber cambiado como resultado.

A continuación, conoce más de cerca cómo la duración y la eficiencia del sueño han cambiado en todo el mundo desde el comienzo de la pandemia a través de los estándares de los usuarios de Samsung Health de todo el mundo.

Cuando se trata de dormir, una mayor duración no significa necesariamente una mejor calidad. En este análisis, la duración se refiere a la cantidad de tiempo en la cama tratando de dormir, mientras que la eficiencia del sueño mide el porcentaje de tiempo en la cama que realmente pasamos durmiendo.